27 de junio de 2007

PLENO

Mirá, lector, todavía no me metí a mirar el tratamiento que hizo Clarín de este tema, pero apostaría a que en algún lugar incluye la frase "en pleno Barrio Parque". El caso más habitual de este comportamiento, que se manifiesta en todos los órganos noticiosos de este multimedio (TN, Telenoche, el Gran Diario Argentino, La Razón, etc.), se refiere al barrio paquete de Buenos Aires por excelencia: Recoleta. Todo hecho violento que ocurra en ese distrito ocurre "en pleno Recoleta", mientras que en otros casos, los homicidios, robos o cualquier otra clase de altercados tienen lugar apenas "en Mataderos", "en Villa Urquiza" o "en Almagro", cuando no "en Turdera" u otros lugares con tan poco glamour.


Cambiando de canal, resultaba muy pintoresco el relato de los paquetísimos vecinos que eran buscados por los medios para dar cuenta de los sucesos desde la cercanía que les permitía el -en todo sentido- privilegiado emplazamiento de sus hogares. Tal es el caso de la -supongo- ex modelo y conductora de programas de cable con helecho en el fondo, Teresa Calandra. La señora le contaba a Maby Wells en Canal 9, que salió a la vereda a increpar a la Policía, porque no avanzaba en la resolución del asunto. Y se preguntaba: "¿Cómo puede ser que un juez tarde tanto en emitir una orden de allanamiento? O sea, Kirchner, María Cristina (sic), ¿qué están haciendo?". Los ciudadanos de bien no se andan con chiquitas. Ante el primer inconveniente, no van a hablar con oscuros subsecretarios, mucho menos con empleados rasos (¡válgame Dios!). Ellos van de una a reclamar la intervención directa del Presidente. Si viene Kirchner con un chaleco antibalas y personalmente le acierta un plomazo entre ceja y ceja al demente que viene a perturbar la paz de tan respetable barrio, mucho mejor.

Como siempre, estamos con usted, Teresa.

Otro detalle simpático es la actidud de las fuerzas del orden. Cuando el año pasado el mismo orate protagonizó un hecho idéntico al de hoy, tras una larga negociación, la Policía desistió del allanamiento y se fue. Me pregunto si esta flexibilidad y esta actitud tan comprensiva y abierta al diálogo se aplicarán también en otras zonas menos exclusivas, o si sólo será así cuando ocurre "en pleno Barrio Parque". Por lo menos, hay que celebrar que esta vez rectificaran la actitud y le pegaran un buen tiro en las pelotas, según dicen los rumores que circulan extraoficialmente por estas horas. Yo, Jefe de Policía, hubiera dinamitado el barrio, pero bueno, cada uno tiene sus métodos. Un tiro en las pelotas también está bien, aunque tiene la contra de dejar vivo a Mariano Grondona, que vive a media cuadra del lugar del hecho. Habrá que ir corrigiendo las técnicas con el tiempo. Estamos seguros de que, si finalmente llega a crearse la Policía Porteña, y cuando esté en manos de Mauricio Macri -otro vecino del barrio- esta indecisión no se va a repetir. Mientras tanto, nosotros le damos nuestro voto de confianza a la vieja y querida Federal.

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